En Nueva York es absolutamente legal Vaporizar Cannabis
El acceso a la sustancia se limita a pacientes con enfermedades graves o terminales y sólo pueden acceder a ella a través del uso -entre otras opciones- de la vaporización. Autoridades del estado norteamericano esperan que su ejemplo sea replicado en otras ciudades del mundo.
Tras la exitosa experiencia del Estado de Nueva York en lo que a aprobación del uso del Cannabis medicinal hecho en junio del año pasado, numerosas son las urbes a través de todo el mundo que han replicado o intentando continuar con esta iniciativa en lo que a uso médico de esta hierba se refiere. Desde que el gobernador, Andrew Cuomo, firmara la legislación que autorizara el uso limitado de esta sustancia a través -entre otras opciones- de vaporizadores para tratamientos clínicos, el mundo cambió.
Si bien Nueva York no fue el primer Estado de la Unión en hacerlo (anteriormente otros veintidos ya habían adoptado esta medida), sin duda la repercusión global que lo hiciera el Estado que cobija la “Gran Manzana”, megaciudad considerada casi “como la capital del mundo”, la decisión neoyorkina logró remecer la conciencia de millones de personas a través de todo planeta, que rápidamente entendieron todos los beneficios del uso del cannabis medicinal, especialmente a través de un camino que cada vez está ganando más adeptos…la vaporización.
El primer estado estadounidense en legalizar la marihuana medicinal fue California, en el año 1996. Desde entonces, veintiún más y el Distrito de Columbia han promulgado leyes similares, de acuerdo con la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales de Estados Unidos (NCSL). Ahora Nueva York se suma a esta lista. Colorado ha ido más lejos y desde el 1 de enero de este año permite a los residentes comprar Cannabis a comerciantes autorizados para uso recreativo.
Uso del Cannabis con restricciones
En el caso de Nueva York, la legislación es clara y definitiva. Ella establece que el acceso a esta hierba estará limitado a pacientes con enfermedades graves o terminales y sólo podrá ser administrada a través de vaporizadores, aceites y productos comestibles. Además, la norma le otorgó autoridad al gobernador para poner fin a su aplicación en cualquier momento, si esta fuera mal usada. Con estas condiciones, las autoridades neoyorquinas pretenden que el uso del narcótico no vulnere la seguridad pública. Y al parecer hasta el momento lo han logrado.
«Esta nueva ley fue un paso importante para aliviar a los pacientes que viven con un dolor extraordinario”, manifestó Cuomo durante una conferencia de prensa en la Academia de Medicina de Nueva York. El gobernador también calificó ´la medida como “la más inteligente” que haya adoptado su Estado. “Esta legislación nos dio lo mejor que la Cannabis medicinal puede ofrecer, de la forma más protegida y controlada posible. Y en ese sentido la vaporización al parecer es una excelente opción para lograr mitigar el dolor de quién hoy sufre”, argumentó en su momento la máxima autoridad neoyorkina. Y según todo lo que hoy se sabe del vapeo, la decisión de Andrew Cuomo fue sin duda la correcta.
Una opción más que saludable
Los expertos dicen que la vaporización del Cannabis es probablemente más saludable y menos irritante para los pulmones que fumar, pero sí advierten que hay que hacerlo con cuidado y mesura, ya que este método de consumo brumosa también puede ser más potente que el de fumar. Este último argumento está basado en los aún pocos estudios que se conocen sobre los efectos a largo plazo del Cannabis a través del vapeo, en comparación con los efectos de la inhalación de compuestos directamente de la planta, método por el cual hace muchos años se conocen trabajos al respecto, señalan los expertos. «No tenemos los mismos datos de seguridad para la vaporización como si los tenemos para cuando se fuma», señala Mitch Earleywine, psicólogo de la Universidad de Albany, en Nueva York, quien fue uno de los responsables del estudio que gatilló la decisión de Nueva York para legalizar el uso del Cannabis medicinal.
Según la ley, los médicos pueden prescribir compuestos de marihuana para personas que tienen condiciones de vida mermadas, a través de patologías graves como el cáncer y la epilepsia. La actual legislación también prohíbe fumar el Cannabis y a la vez limita su uso a través de la toma de píldoras, el consumo de aceites o extractos de la planta, y -por supuesto- la alternativa más recomendada por todos los actores involucrados en ella… vaporizando esta hierba. “Esperamos que tras nuestra gran experiencia y los innumerables beneficios que significa médicamente hablando que los pacientes que estén experimentando dolor, lo puedan paliar a través del vapeo medicinal de la Cannabis, más países y ciudades en el mundo se unan en esta cruzada. Es nuestro deben como autoridades cuidar de la salud de nuestros habitantes. Y eso jamás debemos olvidarlo”, señaló finalmente el gobernador de Nueva York.
Es un aporte más de ANDES VAPOR, el Primer VapoSchop de Chile.